La desigualdad laboral entre hombres y mujeres es una brecha que no ha logrado reducirse y ha continuado en aumento; tanto es así que a 74 por ciento de las mujeres que trabajan, no les alcanza ni para adquirir dos canastas básicas.
De acuerdo con información dada a conocer por la organización Acción Ciudadana Frente a la Pobreza, en México sólo cuatro de cada 10 mujeres tienen participación en el mercado laboral.
Además, de aquellas que cuentan con un empleo, sólo seis de cada cien ganan más de 13 mil 183 pesos mensuales.
Es decir que tres de cada cuatro mujeres que trabajan reciben como salario ingresos menores a seis mil 591 pesos al mes, que es el costo de dos canastas básicas.
Actualmente, 60 por ciento de las mujeres trabajan sin seguridad social. 49 por ciento de las trabajadoras no tienen un contrato estable y 30 por ciento carece de prestaciones.
La diferencia del salario entre hombres y mujeres que realizan las mismas actividades era de 646 pesos antes de la pandemia por COVID-19. Sin embargo, al día de hoy esta diferencia es de mil 72 pesos.
Hipotéticamente, la mujer tendría que trabajar meses de 36 días para igualar al ingreso laboral de los hombres o 39 días para tener un ingreso laboral suficiente para comprar dos canastas básicas", detalla la organización.
Pero ¿cómo afecta a la vida diaria de las mujeres la falta de ingreso propio o el contar con un ingreso precario? La organización explica que estos aspectos son considerados las principales fuentes de origen del acoso, el abuso y la violencia.
Sin ingreso suficiente no se puede acceder a la libertad, al ejercicio de los derechos humanos ni al bienestar" aseguró María Ayala, responsable del área de Investigación de Acción Ciudadana Frente a la Pobreza.