Aunque la farmacéutica asegura que no existe evidencia suficiente de que el padecimiento haya sido causada por la inyección, un segundo voluntario de vacuna de AstraZeneca contra el Covid-19 presentó una enfermedad neurológica: mielitis transversa.
Hace unos días, una primera persona que se sometió al ensayo clínico y tras recibir una de las dosis de inoculación, presentó inflamación en la médula espinal, lo cual le generó debilidad en extremidades y disfunción en intestinos y vejiga. Tras el diagnóstico, se encontró que la paciente tenía un caso previo de esclerosis múltiple, por lo que las pruebas de la vacuna se reanudaron.
Ahora, es otra mujer quien también presenta mielitis transversa. En su caso, el padecimiento se desarrolló tras recibir la segunda dosis de la vacuna. Sin embargo, AstraZeneca aseguró que es poco probable que la enfermedad de ambas tenga relación con la vacuna, o no existe información suficiente para determinarlo, por lo que se continuó con la fase 3 del ensayo clínico en Reino Unido, Brasil y Sudáfrica, pero no en Estados Unidos.
"Si hay dos casos, esto empieza a parecer un patrón peligroso", dijo a The New York Times Mark Sliftka, especialista en vacunas de la Universidad de Salud y Ciencias de Oregon.
También aseguró que podría ser el fin de esta vacuna si se llegara a presentar un tercer caso parecido a los dos anteriores:
"Si surge un tercer caso de enfermedad neurológica en el grupo donde se está probando la vacuna, tal vez sea el fin del proyecto", concluyó el científico.
La farmacéutica, que desarrolla la vacuna junto con la Universidad de Oxford, publicó sus protocolos como una muestra de transparencia. Entre ellos destacan que se busca una efectividad del 50% en la fase 3 del proyecto. La vacuna de AstraZeneca es una de las apuestas del Gobierno mexicano para lograr el control de la epidemia de coronavirus en México.